1914 – PRIMERA GUERRA MUNDIAL – 1918
La Primera Guerra Mundial, fue sin dudas, el laboratorio de desarrollo y perfeccionamiento de nuevas armas que cambiarían para siempre, el escenario bélico mundial. La aparición del tanque desestabilizaría para siempre las posiciones estáticas. Con él, la guerra comenzaba a moverse. La aparición del arma aérea y del arma submarina a gran escala, agregarían una tercera dimensión a los conflictos, era el fin de las tácticas “napoleónicas”. Ya no habría “planeamiento planimétrico” sobre el terreno, a las superficies operaciones conocidas por el largo y ancho de los terrenos y aguas en conflicto, se le agregaban la altura y la profundidad, respectivamente. Pese a que este primer Gran Conflicto de la humanidad quedó estancado en sus posiciones casi iniciales, se resolvería precisamente, por el arrollador avance de los primeros carros de combate. Fue el embrión de lo que, veintiún (21) años después, conoceríamos como la “Blitzkrieg” o “Guerra Relámpago”. Hoy nos ocuparemos de:

LA GUERRA SUBMARINA:
La guerra submarina es una de las tres áreas operacionales de la guerra naval. La guerra submarina a su vez comprende la guerra submarina de ataque, las actividades antisubmarinas, la guerra de minas y las contramedidas para minas. Cada tipo posee elementos y estrategias especializadas que explotan las ventajas tácticas propias e inherentes del tipo.
Como antecedente podemos citar que, la guerra submarina tuvo sus inicios en la Guerra Civil estadounidense. En la década de 1860 la guerra naval sufre varios e importantes cambios. Las armadas de los Estados Unidos y de los Estados Confederados desarrollan varios tipos novedosos de buques de guerra. El submarino fue uno de los nuevos conceptos desarrollados. El primer hundimiento de un buque enemigo por un submarino ocurrió el 17 de febrero de 1864, cuando el submarino confederado CSS H.L. Hunley hundió al USS Housatonic en el puerto de Charleston, Carolina del Sur.
Durante la guerra que enfrentó a Rusia y Japón en los años 1904 a 1906, las armadas de ambos contendientes desarrollaron los primeros prototipos de submarinos torpederos. Sin embargo, no fue hasta la Primera Guerra Mundial cuando los submarinos modernos fueron realmente efectivos. Con la proliferación durante los primeros años del siglo XX de este nuevo tipo de arma naval, fueron Alemania y Gran Bretaña los que demostraron su increíble potencial.
Los submarinos militares alemanes denominados U-Boots tuvieron mucho éxito destruyendo más de la mitad de los suministros británicos transportados por mar. Los ingleses por su parte desarrollaron una familia submarinos similares a los alemanes la que denominaron U-Boat.
El primer submarino de la Royal Navy británica fue desarrollado por John P. Holland y puesto en marcha en el año 1902. Se trataba de un submarino civil y no fue hasta 1905 cuando Alemania comenzó a desarrollar submarinos militares. En el año 1913 se produce el primer U-Boot, un submarino militar propulsado por un motor diesel.
Los franceses en aquella época eran los líderes en cuanto a construcción de submarinos propulsados con vapor. Y para el comienzo de la guerra contaban con un total de 77 unidades mientras que Gran Bretaña disponía de 55.
U-BOOT:
U-Boot es una abreviación de “unterseeboot” que significa bote submarino en español. Cuando comenzó la Primera Guerra Mundial, los alemanes disponían de un total de 29 U-Boots a su disposición. Con el inicio del conflicto los alemanes causaron el hundimiento de 5 cruceros británicos en menos de 10 semanas.
Dado que Gran Bretaña es una isla separada del resto Europa por mar, dependen enormemente de los recursos transportados por medio de barcos. La misión principal de los U-Boots alemanes era la de destruir los barcos mercantes de Reino Unido provocando así un deterioro importante en la línea de suministros británica en lo que se denominó “Campaña U-Boot”. Para 1917, un total de 1.4 millones de toneladas de suministros aliados habían sido destruidas gracias a los ataques de los U-Boots.
Se suponía que todos los participantes adherían a las Convenciones de la Haya de 1899 y 1907 pero ello se demostró impracticable en cuanto a los submarinos. Inicialmente los submarinos alemanes intentaron cumplir con las “Normas de Captura” pero finalmente implementaron una guerra submarina irrestricta. La presión diplomática norteamericana forzó a los alemanes a detener este accionar durante algún tiempo, pero en enero de 1917, Alemania estableció una “Zona de Guerra” (Area de Exclusión) que rodeaba a las Islas Británicas y hundió a un 25% de las naves que osaron penetrar en ella, hasta que los convoyes comenzaron a contar con escolta militar. El hundimiento del “Pathfinder” fue la primera victoria en combate de un submarino moderno, junto con la hazaña del U-9, que hundió tres cruceros británicos en menos de una hora, le otorgaron al submarino el estatus de un nuevo e importante componente de la guerra naval.
Los submarinos alemanes fueron utilizados para colocar minas y para atacar transportes de mineral de hierro en el Báltico. La flotilla de submarinos británicos en el Báltico, operaron protegiendo a los rusos hasta que se firmó el pacto ruso-alemán.
Las pérdidas de suministros fueron reducidas gracias a que los aliados incluyeron convoyes de escolta para proteger los barcos mercantes. Estos grupos de protección estaban compuestos por unos cuantos buques de guerra. Así las medidas empleadas para evitar la pérdida de suministros fueron:
- Agrupar un gran número de barcos mercantes y buques de guerra en un convoy defensivo para mejorar la protección.
- Avances en la tecnología sonar para detectar la posición de submarinos.
- Incremento del uso de aeronaves rastreadoras que tratan de localizar los U-Boots alemanes.
- El incremento de la presencia naval aliada en el Atlántico con la inclusión de EEUU en el conflicto para Abril de 1917.

Hundimiento del RMS “Lusitania”:
El RMS “Lusitania” era un crucero civil que transportaba ciudadanos británicos a Estados Unidos y viceversa. El 7 de Mayo de 1915 fue atacado por un submarino alemán, el U-20 que torpedeó al Lusitania causando su hundimiento en tan solo 18 minutos. El resultado de este ataque fue la muerte de aproximadamente 1200 personas de las cuales 128 eran ciudadanos estadounidenses.
Tras este ataque la guerra submarina entre Gran Bretaña y Alemania comenzó y el presidente de los Estados Unidos, Woodrow Wilson, aunque presionado por Inglaterra para participar, prefirió no declarar la guerra a Alemania manteniendo la neutralidad americana. Sin embargo, el presidente sí que advirtió a Alemania que cualquier movimiento en contra de los derechos de los ciudadanos americanos se consideraría una ofensa y se declararía la guerra.
Buques de Guerra:
La Primera Guerra Mundial mostró la gran vulnerabilidad de los buques de guerra de la época a las nuevas formas de ataque naval como son los submarinos. En 1914 el U-9 (submarino alemán) hundió 3 cruceros británicos en menos de una hora.
Durante la Primera Guerra Mundial apenas hubo lugar para batallas navales históricas, salvo la ya descripta, “LA BATALLA NAVAL DE JUTLANDIA O DEL ESTRECHO DE SKAGERRAK” y en 1914, “LA BATALLA NAVAL DE MALVINAS”, que fue perdiendo importancia histórica, especialmente en nuestro país y que marcaba por los hechos propios, el espacio estratégico de nuestro reclamado archipiélago. El principal conflicto naval se encontraba entre la supremacía alemana submarina y el poderío mercante de Gran Bretaña. Los aliados emplearon de manera destacada un contingente de buques de guerra para apoyar la invasión anfibia de Gallipoli en 1915.